El vicepresidente del Gobierno de Cantabria, Pablo Zuloaga, ha anunciado la inminente incorporación de 20 efectivos más procedentes del Ejército al equipo de rastreadores que trabajan para controlar la propagación de la COVID19 en Cantabria.
El objetivo de Sanidad, según ha explicado, es que al menos 60 rastreadores trabajen cada jornada, todos los días de la semana, para seguir los contactos de las personas que han dado positivo por coronavirus en la Comunidad Autónoma.
Una cifra que ayer se situó en 219 casos y que hoy en las primeras horas había sumado 80 más. En total, más de 7.000 personas permanecen en cuarentena domiciliaria, 3.875 por tener la enfermedad, y el resto de manera preventiva por ser contactos de algún positivo.
Esta evolución “preocupa” al Consejo de Gobierno, según ha explicado el vicepresidente, que ha recordado que Cantabria se mantiene en nivel 1 de alerta por los “bajos” índices de ocupación hospitalaria, con 47 personas ingresadas, 5 de ellas en la UCI.
No obstante, la incidencia a 14 y a 7 días está en unas cifras propias de un nivel 4 de alerta sanitaria y la positividad en un nivel 3 de alerta sanitaria.
Sobre la campaña de vacunación, Zuloaga ha explicado que, como novedad, se está trabajando desde la Dirección General de Universidades con los listados de estudiantes ERASMUS y en el extranjero para comenzar su vacunación, y también se prevé comenzar a administrar las dosis de vacuna a los socorristas que desarrollan su actividad en Cantabria durante este verano.
En total, cerca del 70% de los cántabros mayores de 16 años ya han comenzado su vacunación y más del 51% ya ha completado la pauta.
Por grupos de edad, esta semana ha comenzado la vacunación de las personas entre 30 y 39 años, con un 12,4% de ellos ya con pauta completa, y la previsión de Sanidad es cerrar julio con el 100% de las personas entre 60 y 69 años con las dos dosis administradas.